“Cariño, no eres tú, soy yo…”
“Yo, ¿qué soy yo?”
“No, tú no, yo”
“¿Yo? ¿O tú? ¿Que qué es lo que soy tú?”
“Que no cari, que tú no, que yo…”
“Que yo, ¿qué?”
“Que tú eres yo.. quiero decir, que yo soy tú…”
“¿Pero cómo vas a ser yo? Si yo soy yo…”
“No, mujer, que tú sí que eres tú, faltaría más…”
“Pues ¿por qué dices que yo soy tú?”.
“¡Que yo no he dicho eso!”
“!Y entonces qué coño dices, que me estás liando!”
“Nada, nada, que… que me pases la sal. Si eso ya hablamos mejor otro día…”.