La cosa debio suceder algo como así:

Hace unos doscientos mil años, más o menos, una expedición de biólogos extraterrestres vinieron a este planeta a estudiar su fauna y su flora. Algo rutinario, un grupo de funcionarios haciendo inventario de planetas habitados por la galaxia. En este viaje, uno de ellos se encapricha con unos hominidos muy monos que se ha encontrado, juega con ellos, saltándose el protocolo, y, de alguna forma, los «contamina» inadvertidamete con alguna cosa de las que tiene en la nave, provocando un cambio genético en algunos de aquellos cariñosos seres. Al acabar lo que tuvieran que hacer, recogen todos sus trastos y se van, con aquellos monos mirando las naves alejándose en el horizonte.

Varias generaciones después, aquellos homínidos desarrollan la inteligencia, descubre el fuego, fabrican instrumentos de piedra, desarrollan la agricultura, de la piedra pasan a una sucesión de metales, la máquina de vapor, las armas termonucleares y el TikTok.

Los extraterrestres tienen la próxima visita programada para dentro de poco, y cuando vengan descubrirán el estropicio que provocaron. Siguiendo un protocolo que tiene establecido, tendrán que deshacer todo este follón, borrando de la faz de este planeta a la especie que se desarrolló por sus torpezas.