Ahora que lo de la Singularidad Tecnológica parece que está a la vuelta de la esquina, no está de más recordar a Marvin, un androide que aparece en el gran libro «La Guía del Autoestopista Galáctico«.

Este robot dispone del software «Genuine People Personality» que le otorga la habilidad de sentir emociones y desarrollar una personalidad. Pero al mismo tiempo ha sido diseñado para ser 50.000 veces más inteligente que un humano lo que contrasta con la forma en que es utilizado por la tripulación de la nave en la que trabaja, tareas mundandas como «abrir la puerta» o «recoger papeles del suelo».

Conclusión: se aburre y se deprime. Así que Marvin es un robot frustrado, negativo, odia a todo el mundo, no tiene respeto por nadie, insulta y critica a todo el mundo, se queja durante horas de sus problemas.

Y es que lo de crear seres con inteligencia artificial tendrá su aquel, pero no sabemos como nos pueden salir las criaturas.