Gimnasios para pensar

Hacemos deporte porque en la vida que llevamos no hacemos el ejercicio que necesitamos. Hace apenas unos miles de años recorríamos la sabana cazando o evitando ser cazados, y recolectando. Hoy pasamos nuestra vida frente a un ordenador, en una oficina, en un vehículo, confinados en un espacio de un puñado de metros cuadrados.

Así que inventamos conceptos nuevos: deporte, gimnasia y gimnasios. Conceptos que hace no tanto no existían como tal. No se veía a mucha gente corriendo por las calles de Roma o Atenas, hace dos mil años, por el simple placer de correr. No hacía falta.

El desarrollo de la tecnología nos puede deparar otra vuelta de tuerca a esta historia. La inteligencia artificial puede dar lugar a que tampoco tengamos que pensar, porque de eso ya se encargará ella. Así que en nuestro día a día ni haremos ejercicio ni pensaremos, por lo que a los gimnasios habrá que añadirle algo así como “gimnasios mentales”, por la cosa de no quedarnos ni gordos, ni tontos.