«Jaim… es relojero… trabaja como mecánico de precisión; está, por ello, entre los pocos que conservan la dignidad y la seguridad en sí que nacen de ejerecer un oficio para el cual se está preparado».
Son unas líneas del libro «Si esto es un hombre«, de Primo Levi, un superviviente judío de Auschwitz. Desde la extrema situación de un campo de exterminio, Primo Levi identifica una de las claves que dan sentido a la vida de cualquier persona: ejercer una actividad para la que nos sentimos preparados.