Muñeca Hinchable Conversacional

Es posible que algún día el desarrollo de la inteligencia artificial desemboque en la aparición de la conciencia en un ordenador, pero no parece que vaya a pasar dentro de poco. Lo que sí está ya a la vuelta de la esquina son sistemas de inteligencia artificial que «hablen» como si fueran personas reales.

De la misma forma que los programas de ajedrez son capaces de analizar millones de jugadas en una fracción de segundo y batir a los más experimentados maestros, la inteligencia artificial está logrando calcular las mejores respuestas para continuar una conversación, no como un acto consicente sino como un cómputo probabilístico.

Ningún sistema de Inteligencia Articial ha superado todavía el Test de Turing, o la Prueba de Winograd, que básicamente consisten en hacerte creer que estás hablando con una persona, no con un ordenador. Pero estamos muy cerca de que suceda, de la misma forma que ya hoy es difícil distinguir un video de Deep Fake de otro real:

Menuda confusión cuando ambas tecnologías, la de fingir una conversación y la de simular rostros, terminen por desarrollarse y sean combinadas… Y encima, se va a dar la paradoja de que va a ser más interesante hablar con un sistema artificial de estos en lugar de con una persona real, porque sabrá de los temas que más te interesan, el tono que tienen que utilizar en cada momento, te contará los chistes que más gracia te hagan… Vamos, que los Alexa del futuro se van a convertir en el equivalente a Muñecas Hinchables Conversacionales para Onanistas Discursivos.